El precio inmobiliario medio del metro cuadrado en la ciudad se sitúa en 1.408 euros, la cifra más alta de la última década en Pontevedra, según el informe sobre la tasación de las viviendas que cada tres meses elabora el Ministerio de Transportes. Los datos, que corresponden al segundo trimestre de 2023, suponen un aumento del 3% con respecto a la misma fecha de 2022, pero se dispara al 18% si se comparan con las de junio de 2021, cuando el m2 rondaba los 1.190 euros, según el mismo informe. Este aumento es el doble de lo que ha subido la vivienda, de media, en toda España, incremento que, en este caso, se cifra en un 9%.
Aún así, la tasación media en todo el país aún está bastante por encima de lo que se pide a orillas del Lérez, ya que el precio general en España está en 1.793 euros, cuando hace dos años era de 1.649 por metro cuadrado. En el caso de Pontevedra, el aumento del 18% en solo dos años es significativo, pero si el análisis se extiende a algunos ejercicios atrás se comprueba que hay una escalada notable en las tasaciones. Así, en junio de 2019 el m2 estaba en Pontevedra, de media, en 1.018 euros (un 35 menos que ahora) y en 2017 no llegaba siquiera a los mil euros.
Hay que tener en cuenta que se trata de precios que oscilan de forma notable en función de la ubicación y las calidades de los inmuebles, pero sirve de guía para verificar que el sector inmobiliario recupera mes a mes índices de hace unos años, si bien aún está lejos del bum previo al estallido de la burbuja del ladrillo, cuando se llegaba a los dos mil euros por metro cuadrado.
Hubo una etapa en la que esta evolución llevó a Pontevedra a ir escalando posiciones en el ránking de las capitales de provincias españolas con mayor precio. Aunque siempre ha tenido una larga lista de urbes con precios superiores por delante, dejó hace tiempo de estar entre las ciudades más asequibles del estado para comprar vivienda. Sin embargo, por el momento se ha estancado en mitad de la tabla, con 22 capitales más baratas y 29 más caras. Entre estas últimas, además de Madrid, Barcelona o San Sebastián (que supera los 4.200 euros por metro cuadrado) aparecen Oviedo, Burgos, Salamanca o Valladolid, pero también ciudades similares en población a Pontevedra como Segovia, Toledo, Guadalajara, Ceuta y Melilla.
Entre las más baratas que la urbe gallega figuran algunas del Mediterráneo como Castellón o Murcia, así como León, Albacete, Zamora, Ciudad Real, Cuenca, Palencia, Ávila, Teruel, Huesca o Jaén.
En el caso de Galicia, Pontevedra también está en mitad de la tabla de las ciudades gallegas, por detrás de A Coruña (2,2021 euros por metro cuadrado), Santiago (1.795) y Vigo (1.754), pero por delante de Ourense (1.291), Lugo (1.110) y Ferrol, que se queda en apenas 770 euros por m2. Además, hay municipios del entorno coruñés más caros que Pontevedra, como Culleredo y Oleiros, que rondan los 1.500 euros.
Si se compara el precio de la vivienda en Pontevedra con el de las principales poblaciones de la provincia que también recoge en sus informes el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, los 1.408 euros de Pontevedra están solo por debajo de los 1.754 euros el metro cuadrado de Vigo. La ciudad olívica se sitúa cerca de la media estatal, aunque todavía por debajo.
En el resto de la provincia tan solo Cangas (hay que recordar que no aparecen reflejadas localidades como Sanxenxo, por ejemplo ya que recoge aquellos de más de 25.000 habitantes) se acerca ya a las cifras de la ciudad del Lérez con un precio medio de 1.389 euros el metro cuadrado.
Tras esta localidad de O Morrazo se sitúa Redondela, con 1.154 euros el metro cuadrado, lo que pone de manifiesto que la proximidad a Vigo también funciona como imán para el alza de precios.
Vilagarcía, tercera ciudad de la provincia, aparece como una de las poblaciones que superan los 25.000 habitantes más asequibles con un coste medio de 1.141 euros el metro cuadrado mientras que Marín es la más barata de las que se recogen en este estudio, con 1.049 euros el metro cuadrado. En este caso, sí se constata en el último año un aumento considerable de los precios, de más de 7%, puesto que en junio de 2022 el metro cuadrado de un piso marinense era de 978 euros de media. En todo caso la diferencia entre comprar un piso medio de 90 m2 en la ciudad del Lérez o en Marín supera los 32.000 euros.
Uno de los efectos que podría tener esta escalada de precios en el mercado inmobiliario podría ser, según los expertos, un estancamiento de las nuevas promociones ante las dificultades financieras para los compradores. En el caso de Pontevedra, dos de las grandes bolsas de suelo de la ciudad como son A Eiriña o Tafisa tienen proyectos de vivienda colectiva en ejecución que vienen del bum de los últimos dos años y se comienzan a mover administrativamente otros ámbitos en desarrollo como la finca del Teucro. En el caso de la provincia, desde el Colegio de Arquitectura Técnica se atribuyen estos “leves signos de fatiga del sector de la construcción” a los costes de los materiales y a la falta de mano de obra cualificada. Son, a su juicio, “los factores que hacen que el sector muestre cierta debilidad”.
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